Para el artículo de esta ocasión, me inspiré en un documental titulado "Evangelio Americano: sólo Cristo" el cual vi por recomendación de mi esposo. Si tienes la oportunidad de verlo lo puedes encontrar en Amazon y dura aproximadamente 2 horas y 20 minutos, bastante largo para mi gusto ya que con más de una hora me distraigo fácilmente pero en esta ocasión no fue el caso ya que me pareció muy interesante la información que se menciona.
Si bien no voy a hablar de todo el documental como tal, pero sí lo haré de tres minutos específicos porque creo que es fundamental entender tanto en nuestra mente como en nuestro corazón lo que Dios a hecho por nosotros a través de Jesús.
Para una mejor explicación tomé una captura de pantalla a dos imágenes del documental ya que facilita la comprensión para aquellos que somos más visuales, (reitero que el crédito de esas imágenes es totalmente a los autores de la película y no son imágenes creadas por mí).
Quiero comenzar con la imagen donde se ven dos tablas, esa hace referencia a la ley que Dios nos dio, la cual especifica la forma recta de vivir ante los ojos de Dios. Desde tiempos del antiguo testamento Dios le dio a Su pueblo leyes a seguir, sin embargo esas leyes fueron quebrantadas una y otra vez, y de forma casi irónica cuando Jesús vino como hombre a la tierra se encontró como una gran cantidad de leyes creadas por hombres que sólo causaban un peso enorme debido a lo rigurosas y difíciles de cumplir.
El apóstol Pablo habla de la ley de una forma muy precisa y entendible, en su carta a los romanos, en el capitulo 7 versículo 7: "¿Qué diremos, pues? ¿La ley es pecado? En ninguna manera. Pero yo no conocí el pecado sino por la ley".
Te recomiendo que leas todo el capítulo, muy probablemente te identificarás con la lucha de la que Pablo habla, en el versículo 22 y 23: "En mi interior yo estoy de acuerdo con la ley de Dios. Pero veo que aunque mi mente la acepta, en mi cuerpo hay otra ley que lucha contra la ley de Dios. Esa otra ley es la ley que impone el pecado. Esa ley vive en mi cuerpo y me hace prisionero del pecado".
¿Qué podemos resumir hasta aquí acerca de la ley de Dios? nos fue entregada y dada a conocer para honra de Dios pero todos nosotros nos descarriamos como ovejas, y nos apartamos de su camino; mas Jehová cargó en él el pecado de todos nosotros (Isaías 53:6). Por el pecado que mora en nosotros nunca hemos podido cumplirla ya que nuestras propias fuerzas simplemente no son suficientes, afirmar lo contrario y creer que somos buenos y autosuficientes para cumplir la ley es como decir que el sacrificio de Jesús en la cruz no fue necesario.
Volviendo a la imagen y yendo en sentido contrario a las manecillas del reloj, está un cordero que hace referencia a los sacrificios que se ofrecieron como manera de obtener el perdón de los pecados del pueblo, el cordero que se sacrificaba debía estar en perfecto estado, era simbólico y siempre nos apuntó a la necesidad de ser salvados de nuestras maldades e iniquidades, nuevamente se observa que no fuimos nosotros quienes nos salvamos, fue alguien más ofrecido en nuestro lugar.Pero los sacerdotes que los ofrecían eran hombres que al igual que nosotros pecaron e incluso algunos de ellos se volvieron malévolos, que es la siguiente imagen.
También había jueces que dijeron al pueblo de Dios "hagan lo correcto" pero eso tampoco funcionó, así que el pueblo de Dios eligió tener un rey como las otras naciones y pensaron que así serían mejor dirigidos y salvos, y se eligió al mejor candidato de entre ellos, se buscaron cualidades como alto, fuerte, apuesto y se le dio la honra de ser el líder de la nación pero su rey se volvió egoísta, no fue el gran rey que esperaban y seguido de él desfilaron una gran cantidad de reyes, unos acercaron el pueblo al corazón de Dios, otros lo alejaron, pero ninguno fue el rey que ellos verdaderamente necesitaban.
Así que se dieron profetas para que hablaran en nombre de Dios a los reyes y así ellos al escucharlos podrían tomar mejores decisiones, pero apenas y los profetas decían algo diferente a lo que la gente quería escuchar se volvían víctimas del pueblo muriendo a manos de ellos.
Aquí es cuando comienzas a comprender que a lo largo de mil años Dios está diciendo que necesitamos un mejor guardian de la ley, un mejor juez, un mejor sacrificio, un mejor profeta, un mejor sacerdote, necesitamos un mejor rey.
Necesitamos a Jesús. El hijo de Dios.
Lo que la ley no podía hacer porque no pudo contra la naturaleza humana, Dios lo hizo al enviar a su Hijo, quien vivió con la misma vida con la que todo ser humano peca. Lo envió como una ofrenda para pagar por el pecado y así Dios se valió de esa vida humana para condenar el pecado. Todo esto lo hizo Dios para que pudiéramos vivir aprobados tal como exige la ley. Ya no vivimos de acuerdo a la naturaleza humana, sino que vivimos de acuerdo al Espíritu (Romanos 8:3).
Antes, ustedes estaban alejados de Dios y su manera de pensar los hacía enemigos de Dios porque practicaban la maldad. Pero ahora Dios, por medio de la muerte física de Cristo, los ha convertido en sus amigos. Cristo murió para presentarlos santos ante Dios, es decir, sin ninguna mancha ni maldad que pueda ser juzgada por Dios (Colosenses 1:21-22).
En esos dos versículos mencionados arriba vemos a Jesús ser mencionado constantemente porque él es quien nos hace perfectos. No fuimos tu ni yo quienes pudimos lograrlo, fue él. Jesús es él cordero perfecto quien se sacrificó una sola vez por los pecados, y es suficiente para todos los tiempos. Él es nuestro sumo sacerdote y está sentado a la derecha de Dios sirviendo en el Lugar Santísimo, el verdadero lugar de adoración que fue hecho por Dios, no por los seres humanos. (Hebreos 10:12, Hebreos 8:1-2).
Además, Jesús es el elegido por Dios para ser Juez de vivos y muertos (Hechos 10:42). Él es mejor que cualquier otro juez que existió en el pasado, y por lo que leemos en Hebreos 1:1-3 Jesús es mejor que cualquier profeta que Dios uso para hablar de maneras parciales y variadas. "En estos últimos días, Dios nos ha hablado de nuevo a través de su Hijo. Él creó todo el universo por medio de su Hijo, a quien nombró heredero de todo lo que existe. El Hijo muestra la brillante grandeza de Dios; es la imagen perfecta de todo lo que Dios es y sostiene todo el universo por medio de su poderosa palabra. Después de haber hecho purificación de pecados, se sentó a la derecha del trono majestuoso de Dios en el cielo".
Y para terminar este pequeño artículo, Jesús es Reyes de Reyes, es mejor que cualquiera que haya habido antes, él vendrá por segunda vez, pero ya no para ofrecerse por los pecados de la gente, sino para salvar a los que esperan su venida. Te animo a ti que estás leyendo esto a que continues esperando y deleitándote en él, sabiendo que él es el mejor y él más importante en todo aspecto.
Yo, Jesús, he enviado a mi ángel para que les cuente todo esto a las iglesias. Soy el descendiente de la familia de David, soy la brillante estrella de la mañana. Apocalipsis 22:16